Por Adriana Lynch (*)
Mujer que acuna a un hijo
que no durmió este invierno,
la que desvestida
está vistiendo al niño…
Mujer que espera a un hombre
que nunca volvió…
Y la que espera al hombre
que vuelve cada día
y entre los dos se enfrentan
a una mesa vacía
con los hijos…¡esperando!
A la que no le importa
el pudor, ni la fama,
ni que entre los vecinos
la llamen dislocada,
esa que hace ya tiempo
se cuestionó el amor…
Mujer que mira a otra
que ríe a carcajadas,
pero quizás llega a casa
y permanece callada…
Y la que dejó un sueño
dormido en algún pueblo,
y que de noche a veces
lo recuerda en silencio…
Mujer trabajadora,
mujer que es sexo fuerte,
la misma que tiene
las manos… surcadas…
Mujer que quiere tierra
para sembrar semillas
y que su Patria al fin
¡coseche el día!
Y la que en nuestras calles
vocea sus reclamos,
exigiendo con justicia
lo perdido en tantos años…
Mujer, con todas ellas,
yo junto mis pedazos,
armo un rompecabezas
y allí… ¡me veo entera!
Mujer, mitad del cielo…
Mujer, que aquí en mi tierra…
tiene dos mil caras,
¡y está llena de encuentros!
(*) Adriana Lynch. Miembro del Foro por la Recuperación del Paraná. Docente.
