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PUERTOS SOBERANÍA

Declaración de la Asamblea por la Soberanía de Puerto Quequén

Compartimos el siguiente comunicado:

SOLICITAMOS QUE EL GOBERNADOR DE LA PROVINCIA DE BS. AS. INTERVENGA CON URGENCIA EL CONSORCIO DE GESTIÓN ANTE EL INMINENTE RIESGO DE SUFRIR TREINTA AÑOS MÁS DE DESPOJOS.

Desde hace más de tres años esta ASAMBLEA viene bregando por: 1° La creación de una Sociedad del Estado de la Prov. De Bs. As. que opere esta Terminal, propiedad del Estado provincial, con el objetivo de garantizar el Servicio público de la misma. 2° Recuperar para los bonaerenses una Renta comercial multimillonaria en divisas, creando para ello, una Sociedad del Estado provincial exportadora que actúe como empresa “testigo” para evitar la evasión y fuga de divisas, transparentando el comercio exterior de granos en una Argentina que sufre una estructural carencia de divisas para su desarrollo. 

Ello es fundamental para lograr la tan ansiada Soberanía económica, pues el sector agroexportador aportó en el último lustro el 92% de las divisas netas (las que ingresan por exportaciones menos las que egresan por importaciones), es decir, de cada 100 dólares que quedaron en la economía nacional, 92 los puso este sector  altamente extranjerizado, logrando un lugar de privilegio en el manejo de las divisas extranjeras que lo transforma en un gran pulmón financiero con alto poder de fuego político: Definen el rumbo monetario del país, incluyendo la transferencia de la renta agraria al parasitismo financiero cuando gobiernos liberales promueven políticas de especulación sobre las productivas, luego fugan sus divisas gracias a fraudulentos endeudamientos, como el caso Vicentín, ciclo de saqueo que se vuelve a repetir con el actual gobierno de Milei.

Alarma que el Consorcio haya contratado un estudio jurídico privado propuesto por la Cámara Industria Aceitera Rep. Arg. (Corporación que representa los intereses de exportadores extranjeros) para confeccionar los pliegos para concesionar nuevamente esta Terminal que es patrimonio del pueblo. Ello constituye una grave irregularidad que direcciona la licitación, y demuestra una vez más que el Consorcio funciona como un “representante privado” de empresas monopólicas. Más grave y opaca se torna la situación debido a que el Consorcio se ha negado a darnos información sobre el proceso licitatorio, solicitud que fue acompañada y respaldada por más de 400 ciudadanos, muchos de ellos de reconocidos méritos en defensa de la patria. En estos momentos, círculos habitualmente bien informados, afirman que el Consorcio estaría ejerciendo presión para mantener todas las decisiones del Directorio bajo “un pacto de confidencialidad”. 

Resulta absolutamente incompatible que firmas exportadoras privadas operen simultáneamente una Terminal, pues así conforman trust comerciales pagando precios sensiblemente inferiores a los productores de la región. Esta maniobra se suma a innumerables otras denunciadas por nuestra Asamblea que perjudican a toda la población. Las exportadoras, no solo han pasado a ser el poder económico dominante de la región; sino que también compran voluntades en la política, sindicatos y medios de difusión, colonizando el pensamiento y los actos de los ciudadanos. 

Por todo lo expuesto, solicitamos a todas las fuerzas soberanistas argentinas la más amplia difusión de esta denuncia y realizar las acciones que estimen pertinentes a los efectos de llegar a las autoridades de la provincia de Bs. As. que puedan poner freno a políticas que nos remiten a lo peor de la entrega menemista.

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RÍO PARANÁ SOBERANÍA

¡¡¡El gran río de agua dulce no se toca!!! ¡¡¡No a la licitación del dragado del río Paraná!!!

Por Feliciano Ramos (*)

Una publicación revela que: Estudios presentados recientemente en el congreso de @saludsocioambiental de Rosario demostraron que el río Paraná ha alcanzado un récord histórico de contaminación por glifosato, que lo convierte en el río con mayor contaminación de Sudamérica. Los biólogos autores de este informe, explican cómo los residuos se acumulan en el barro del río liberando sustancias que afectan los organismos acuáticos y a quienes viven en la cuenca. Esto, traducido al lenguaje cotidiano, dice que afecta a los peces y demás especies acuáticas, y quienes viven en la cuenca se refiere a animales y también a nosotros, las personas que tomamos agua del río Paraná, cocinamos con esta agua, nos duchamos con esta agua y hasta nos tomamos unos matecitos con esta agua del Paraná muy contaminada que, así como a los demás animales, daña nuestra vida y nos enferma sin que nosotros reaccionemos.

Combos de venenos que consumidos con el agua del río Paraná. Además se detectaron restos de glifosato con atrazina, metolacloro, cipermetrina y otros agroquímicos que llegan desde los campos de soja.   

Los estudios además revelaron una alta tasa de mortalidad y malformaciones en anfibios.

El río Paraná, sus islas y humedales, con su exuberante flora y fauna, era en el pasado un complejo ecosistema que por muchos años brindó a las poblaciones litoraleñas bienestar, salud y felicidad.

Pero desde aproximadamente el año 1994, el gobierno traidor y entregista de entonces entregó a los extranjeros los puertos y el dragado del río Paraná. Este río, desde esa entrega hasta hoy, fue descuidado y además ha sido y es sacrificado hasta convertirlo en lo que es hoy, un río contaminado y totalmente destruido por un sobredragado y un mal dragado de refulado sin cuidar el río. Se dibujaron los pocos informes ambientales hechos por dudosas empresas privadas que los mismos extranjeros contrataron, los que convalidaron el dragado destructivo. No tienen en cuenta el río sino priorizar las ganancias.  

Desde el año 1994 hasta hoy, la empresa belga Jan de Nul ha dragado el río Paraná solo para que las terminales portuarias extranjeras ganen millones de dólares, en una exportación que debería ser hecha por medio de puertos argentinos, no extranjeros.

El dragado hecho por la dragadora extranjera Jan de Nul  para los puertos extranjeros en el río Paraná, nos ha costado a los argentinos miles de millones de dólares en lo 30 años de dragado. ¡¡Sí!! El Estado argentino con nuestros impuestos vino pagándoles a estos gringos miles de millones de dólares solo para que profundicen el río así los puertos extranjeros ganan más millones de dólares. La extranjerización de puertos y dragado no solo nos sale muy caro a los argentinos, sino que además nos arruina el río porque solo importa dragar más ancho y más profundo para que salga más cargado el buque. Nada queda al Estado ni a los argentinos de este saqueo de las exportaciones argentinas manejadas por puertos extranjeros, solo el río sacrificado y más pobreza en la población.

Las víctimas de este sistema son el río y su gente

Nos ha quedado un río detonado, con sedimentos llenos de glifosato circulando, más bancos de arena que nunca y muchas más zonas criticas (que se vuelve a tapar). Hoy más que nunca el río reacciona a un sobre dragado y cuanto más ancho y más profundo se drague más se va a colapsar, se va a tapar.

No importa el río, solo las ganancias

Ser un país agrícola ganadero va a terminar con el propio país, con sus campos, con sus ríos, con su flora, su fauna y con sus habitantes. 

Si este es un país netamente exportador, donde las exportaciones principales están en manos extranjeras, que se la llevan toda y que por esto poco y nada aportan al fisco.

Las licitaciones de dragado sirven solo para aumentar  las ganancias de los puertos extranjeros. Eso sí, los puertos extranjeros jamás pagan las licitaciones de dragados,  el Estado, o sea el pueblo con sus impuestos, las paga.

Mantener las ganancias de los que nada aportan les sale carísimo a los argentinos, caro en impuestos que en vez de ir a las obras destinadas van a las licitaciones de dragado extranjero del río Paraná y caro, carísimo para tu salud porque dependés totalmente del agua del río Paraná aunque vivas a kilómetros del río.

Me baso en todo esto, en el daño ambiental hecho al río a través de 30 años de dragado extranjero para manifestar claramente que los argentinos debemos oponernos a cualquier licitación de dragado del río Paraná.  

¡¡¡NO A LA LICITACIÓN DEL DRAGADO DEL RÍO PARANÁ!!!

La justicia tiene el deber de defender la salud de los argentinos y de defender la integridad del complejo río Paraná, Río de La Plata y río Uruguay,  son ríos estratégicos para el país y su población.

Que no  nos dañen más el gran río de agua dulce. ¡¡¡EL RÍO PARANÁ NO SE TOCA!!!

Hace unos cuantos meses atrás le decía estas cosas a un amigo y este me contestó: “mira,  yo nunca voy al río, ando todo el dial laburando en el taxi, así que todo este tema no me interesa”. Esta contestación me hizo pensar, cuántos argentinos que la luchamos cotidianamente inmersos en nuestros propios problemas no estamos interesados en lo que pasa por el río Paraná. Es entonces que le contesté a mi amigo: “mirá, al río no vas nunca pero el río viene a vos todos los días, en tu casa cuando abrís la canilla para llenar la pava y tomarte unos mates, cuando llenás la olla para cocinar, cuando te duchás, cuando lavas tu taxi, cuando tomás agua, esa agua es el río Paraná que va hacia vos todos los días, una cosa tan cotidiana como abrir la canilla de tu casa se está poniendo cada vez más riesgosa porque tomás contaminación, tomás glifosato por más que esta agua sea potabilizada.

El río viene a vos todos los días

El agua potable es un bien muy preciado en todo el mundo, los gobiernos tienen régimen de protección  especial de esta riqueza tan valiosa para la vida misma, sin ella nada ni nadie vive. En nuestro país tenemos un gran río de agua dulce del que millones de personas bebemos, porque no solo los del litoral, sino también los de la Capital Federal (C.A.B.A) beben y cocinan con las mismas aguas que cambian de nombre por el de Río de la Plata.

Más de la mitad del país bebe del río Paraná

Pero por qué será que los mismos que bebemos las aguas del río no las cuidamos, no nos importa, ¿deberemos esperar a que sea tarde para reaccionar?, ¿a que llegue el momento que en la canilla de nuestro hogar no salga nada que se pueda beber? 

Hoy se está entregando el manejo del agua potable a empresas extranjeras, ya conocemos lo que hicieron los extranjeros con el río Paraná, ya sabemos que el daño ambiental es un hecho. Es una locura, un suicidio colectivo entregar el manejo del agua y de nuestros ríos a los extranjeros. Es una locura volver a licitar el dragado del río Paraná. Porque a la licitación del dragado del río Paraná no la pide la gente, la piden las terminales portuarias extranjeras. Y repito una y mil veces: ellos no pagan las licitaciones, nosotros, el pueblo argentino si, con nuestros impuestos ¡¡que quede claro!!  

Por todo esto: ¡¡¡EL GRAN RÍO DE AGUA DULCE NO SE TOCA!!! ¡¡¡NO A LA LICITACIÓN DEL DRAGADO DEL RÍO PARANÁ!!!

(* ) Capitán Fluvial – Miembro del Foro por la Recuperación del Paraná

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SOBERANÍA

Defender al INTA es un acto de soberanía

por: Daniel López y Pablo Benetti

Desarrollar una tecnología nacional significa menos dependencia de generadores de tecnologías de dominio. Significa un desarrollo de la agroindustria nacional. Significa alimentos de calidad real. Significa una condición indispensable para el sostenimiento y desarrollo de los pequeños productores y campesinos. Cuando se rompe con tecnologías de la dependencia se libera al conjunto del pueblo.

El ataque al INTA por parte del gobierno de Milei movilizó a sus trabajadores en su defensa, contando con el apoyo y adhesión a esta lucha por parte de la comunidad científica, las universidades, particularmente agronomía y veterinaria, de las organizaciones de campesinos pobres y de la agricultura familiar, de chacareros y cooperativas; incluso la mayoría de las organizaciones de la Mesa de Enlace manifestaron su rechazo a la medida. Es necesario profundizar el debate con el conjunto del pueblo y unir esta causa a las luchas que recorren la Argentina contra el hambre, los salarios, las fuentes de trabajo, la salud y educación y en defensa de la soberanía.

El INTA tiene una característica que lo diferencia de la mayoría de los institutos de investigación del mundo. Esta característica es lo que se llama extensión, que es la conexión con el productor particular para la transferencia de tecnología. Esa conexión también demanda solución a problemas de la producción, sobre todo en el pequeño y mediano campesinado. Esta extraordinaria relación con los productores condiciona las líneas de investigación es decir obliga a investigar cómo resolver problemas concretos y le da el carácter nacional que ha diferenciado al INTA. Hay otra condición que lo hace nacional que es su dirección política colegiada, creada por ley, de productores, gobiernos y otros estamentos científicos como las universidades.

En cada región el gobierno colectivo del INTA lo integran representantes prácticamente de todos los sectores de la producción relacionada con lo agropecuario, como por ejemplo representantes de la agroindustria o colegios de veterinarios y agrónomos. Así la producción de INTA de tecnologías nacionales ha estado al servicio de los productores en contraposición de las tecnologías de los monopolios imperialistas, al servicio de esos monopolios que fortalecen la dependencia y no benefician a los chacareros o a los pequeños productores regionales. Esta característica molesta a los amanuenses, cipayos de los imperialismos de turno.

La otra condición que molesta y ha molestado históricamente, necesaria para su independencia científica y tecnológica, es su autonomía y autarquía, es decir contar con fondos propios y manejarlos de acuerdo a sus criterios y necesidades, con una condición extra que esos fondos son acumulativos, lo que no se usa en un año pasa a los fondos del año siguiente. Condición intolerable para los colaboradores de la dependencia. Crear nuestra propia tecnología o adaptar a nuestra tecnología conocimientos generados por la ciencia mundial es una acción que pone en el pueblo las decisiones fundamentales de nuestro futuro, por lo que es un acto de soberanía. Durante los años que aplicamos tecnología de insumos importados, tecnologías propuestas por los monopolios imperialistas no solo han desparecidos miles de productores directos, sino que han sido degradadas más de 40 millones de hectáreas de los mejores suelos del mundo. Por supuesto que las direcciones políticas del INTA han estado en debate en toda su historia y los éxitos o fracasos de sus políticas tuvo que ver con las contradicciones de terratenientes, campesinos ricos, campesinos medios y campesinos pobres y la correlación de esas fuerzas en su dirección.

Las medidas tomadas por el gobierno nacional de “transformar” al INTA, rompiendo la forma de gobernanza que existía, disolviendo el Consejo Nacional, designando a un presidente que responde al gobierno como único decidor de las políticas a llevar por el INTA, lleva indefectiblemente a un organismo dirigido por las corporaciones del agronegocio, los grandes productores y las empresas que proveen los agrotóxicos, llevando a un INTA cada vez más chico, donde la extensión desaparezca, donde se plantea el cierre de las de 100 agencias de extensión rural, la venta de los inmuebles y campos, desguazando las experimentales que son los espacios donde se prueban las tecnologías que luego las Agencias de extensión difunden y validan en los campos de los productores, un INTA que solo responda a la demanda de la agroexportación, dejando de lado las economías regionales y a sus productores. Por todo esto planteamos urgente marcha atrás de todas las medidas tomadas y hacemos un llamado al pueblo argentino a defender al INTA y su patrimonio, porque hacerlo es un acto de soberanía de nuestro pueblo.

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FERROCARRILES SOBERANÍA

Privatización del Belgrano Cargas. ¿Quiénes están atrás del proyecto de entrega de Milei?

Por Gabriel Carpano (*)

Río Tinto y el papel de Estados Unidos

El gobierno de Milei avanza con el saqueo de nuestro país, entregando soberanía y ofreciéndose como la pieza clave de los Estados Unidos en nuestra América del Sur. En este marco, y sobre la base del DNU 70/23 y la Ley Bases, el gobierno impulsa la privatización del Ferrocarril Belgrano Cargas, única línea del transporte de cargas en manos del Estado.

En ese sentido se conocieron en las últimas semanas las negociaciones públicas (imaginemos las privadas…) entre funcionarios de la Secretaría de Transporte, de Trenes Argentinos y de la Secretaría de Minería, con los representantes de la megaminera Rincon Mining (ex Río Tinto), abiertamente interesada en quedarse con este activo estratégico para el transporte del litio que extrae desde Salta y Catamarca.

Rincon Mining, la filial local de Río Tinto, es una de las mineras más grandes del mundo que opera proyectos de extracción de litio en Salta y Catamarca. En el directorio de Río Tinto aparecen entrelazados algunos de los fondos financieros más poderosos: BlackRock, Vanguard, SSgA, además de la estatal Aluminum Corporation of China. Los principales propietarios de Río Tinto agrupados por países de origen son: 16,7 % de Estados Unidos, 16,6 % del Reino Unido, China 14,56 % y Australia 3,2%, con un control preponderante de los capitales yanquis, al punto que en las negociaciones con el gobierno argentino participan directamente representantes de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos, que son a su vez asesores de Río Tinto.

Por su parte, Tesla –la empresa de Elon Musk– mantiene un acuerdo de exclusividad con la minera para asegurar el suministro de litio para sus autos eléctricos.

La principal productora de litio en el país es Arcadium Lithium, una sociedad que nació de la fusión entre Livent y Allken. En marzo de este año Arcadium fue adquirida por la mega operadora Río Tinto por un total de 6.700 millones de dólares. En el país, Arcadium Lithium pasó a llamarse Río Tinto Lithium e incluirá el proyecto Rincón, operado en el país por Rincon Mining Pty Ltd sucursal argentina.

Los monopolios imperialistas, a través del gobierno títere de Milei, empujan la entrega de esta vía fundamental, para asegurarse el control y transporte del litio y otros minerales considerados estratégicos desde el punto de vista de la seguridad (los llamados minerales críticos o tierras raras). Este es un objetivo central dentro de la política de Trump de mantener la hegemonía del imperialismo yanqui en el continente americano, al que consideran su patio trasero. Para este objetivo el gobierno de Milei y su política de entrega son claves.

Las grandes cerealeras exportadoras de aceites y materias primas, dueñas de los principales puertos de Rosario, como Cargill, Cofco, Bunge y Viterra, con todo el poder que detentan, también han planteado interés en quedarse con parte de este servicio.

Para los yanquis la Argentina es clave por sus recursos naturales (petróleo, minerales, cereales, agua) y por su ubicación (paso entre los dos océanos, proyección sobre la Antártida), como ya planteara la anterior jefa del Comando Sur estadounidense Laura Richardson.

Para este proyecto de profundización de la dependencia y el saqueo Milei quiere entregar el Belgrano Cargas, y con ese objetivo se mueven monopolios como Rincon Mining/Río Tinto, con el apoyo “a cielo abierto” del gobierno de Estados Unidos.

Ferrocarriles y Soberanía

El control de los ferrocarriles es una pieza fundamental para la Soberanía del país. Siempre se corresponde el modelo ferroviario imperante al modelo de país que se implementa. Como decía Scalabrini Ortiz, adquirir trenes es ganar soberanía. Por eso atacan tanto las posibilidades de un desarrollo independiente de nuestro sistema ferroviario. Porque con la nacionalización de los trenes en 1948 llegamos a tener la red mas extendida de América Latina, con 48 mil Km. de vías, un desarrollo industrial autónomo que incluyó 37 talleres y cientos de Pymes vinculadas, 120 mil trabajadores, técnicos e ingenieros ferroviarios que alcanzaron una tecnología de avanzada, la vinculación de miles de localidades y la posibilidad para el pueblo de viajar barato, rápido y reduciendo los daños al medio ambiente. Por eso el ferrocidio que se inició con la Revolución Fusiladora del ´55, continuó con el plan Larkin en los ´60, se profundizó en la última dictadura y tuvo su golpe de gracia con las privatizaciones de los ´90.

La privatización implicó que 90 mil ferroviarios quedaran en la calle, el abandono de alrededor de mil pueblos y el desguace de nuestra industria nacional ferroviaria. Al mismo tiempo la fragmentación del sistema ferroviario, entregando la carga a los monopolios y el pasaje a empresarios corruptos como los Cirigliano. Eso terminó en la Masacre de Once el 22 de febrero de 2012, con 51 muertes y más de 800 heridos. Así que ya conocemos las consecuencias de la privatización: desindustrialización, desocupación, abandono y tragedias.

La lucha de los trabajadores ferroviarios del Sarmiento, junto a los Familiares de la Masacre de Once y las agrupaciones de usuarios que defienden el ferrocarril lograron la condena de los Cirigliano (TBA), y funcionarios corruptos como Jaime, Schiavi y De Vido.  En ese contexto volvieron al Estado 5 de las 7 líneas de pasajeros del AMBA y el Belgrano Cargas fue recuperado en 2013.

¿Por qué tanto interés en el Belgrano Cargas?

El Belgrano Cargas incluye las ex líneas Urquiza, San Martín y Belgrano. Es la única línea de cargas que se recuperó para el Estado nacional en el 2013,  ya que las otras 3 permanecen desde la privatización menemista en manos de monopolios privados. Aceitera General Deheza tiene la concesión del Nuevo Central Argentino, Techint la del Ferroexpreso Pampeano y Loma Negra la del Ferrosur Roca. Estos monopolios utilizan las vías y el material rodante públicos para trasladar sus productos con un beneficio exclusivo, en detrimento de las economías regionales y los pequeños y medianos productores.

Sus vías atraviesan 17 provincias y opera una red de 7.600 kilómetros, transportando 8,5 millones de Toneladas (el 38 % del total de cargas por tren del país). Por allí pasa gran parte de la producción agropecuaria nacional –no solo los productos de la Pampa húmeda-, como tránsito previo a la exportación de esas mismas materias primas, sumado a la producción minera del norte del país. Por todo eso el Belgrano Cargas es un bocado muy apetecible, no solo es un tren: es la vía terrestre que conecta las reservas de litio del norte argentino con los puertos de exportación.

La importancia del tren de cargas para un proyecto de soberanía

Para un proyecto emancipatorio, de soberanía del país sobre sus recursos y las palancas fundamentales de su economía, el transporte de cargas es clave.

Primero porque entrelaza las distintas regiones productivas del país, lo que permitiría vincular las economías regionales y que los pequeños y medianos productores puedan comercializar su producción sin tener que subordinarse a los monopolios y acopiadores.

Por otro lado, la carga es superavitaria, da ganancias, como muestran los datos oficiales para el Belgrano Cargas, lo que en un sistema estatal integrado serviría para solventar al tren de pasajeros, que “contablemente” siempre da pérdidas (aunque además de ser el medio de transporte más económico, rápido, seguro y menos contaminante para que viaje el pueblo, el tren de pasajeros produce un ahorro en mantenimiento de rutas, accidentes viales y daños ambientales que en realidad también genera ganancias para el país).

El plan del gobierno para la privatización

El gobierno viene planteando que la privatización implicaría dividir la actual empresa en tres partes, con lo que avanzarían en la licitación de infraestrucutra de las vías,  concesión del uso de los Talleres, y venta del material rodante mediante remate público. Al actual Belgrano Cargas se lo dividiría en tres ramales, donde el que gane la licitación se llevará una traza completa. En este contexto, la minera Rincon Mining–Río Tinto pretende quedarse con la traza que surca las provincias con las principales cuencas de litio.

Este proyecto de privatización incluye a talleres emblemáticos como el de Tafí Viejo en Tucumán, considerados en su momento como los mejores de América del Sur, que llegó a contar con más de 5.600 trabajadores, con capacidad para construir vagones de carga y de pasajeros de calidad y confort, y multiplicidad de repuestos.

A su vez, el plan de privatización no se agota en la carga, sino que pretenden avanzar luego con los trenes de pasajeros. Para este objetivo profundizan el deterioro en las condiciones de los trabajadores ferroviarios, con la pérdida del poder adquisitivo del salario, la falta de insumos, cierre de boleterías y los aprietes de la empresa. Sobre esta base impulsan los retiros voluntarios, la jubilación anticipada y los despidos sin causa (con Milei ya tenemos 3 mil ferroviarios menos), como parte del achique de personal y deterioro de los trenes, para generar las condiciones previas a la privatización. Con ese norte también se incrementan la reducción de servicios y las cancelaciones, haciendo que viajar sea cada vez más difícil, y como ya hicieron en los ´90, justificando en esa “ineficiencia” del Estado la privatización y los negociados con los terrenos y con los subsidios.

La esperanza es defender lo nuestro en unidad

El ferrocarril cuenta con una larga historia de entregas, ataques, achiques, desmantelamientos, pero también una extensa y rica historia de luchas. Desde la fundación de La Fraternidad en 1887, la huelga general del ´61 contra el plan Larkin, la huelga ferroviaria de 1977 contra la dictadura, las huelgas y movilizaciones contra la privatización en 1991 y 1992, las innumerables peleas de pueblos enteros defendiendo el ferrocarril, el movimiento Salvemos al Tren, las denuncias, paros y manifestaciones de los ferroviarios del Sarmiento desde el año 2000.

Hoy va creciendo la unidad y la decisión de nuestro pueblo para enfrentar este plan de saqueo y  ajuste del vendepatria de Milei. Por eso intentan amedrentarnos y frenarnos con represión, persecución a las organizaciones que nos oponemos a esta política, la condena y proscripción de Cristina Kirchner. Pero no van a poder,  el pueblo lo está demostrando en las calles y en las plazas de nuestro país.

Necesitamos y podemos desarrollar un amplio movimiento contra la privatización del Belgrano Cargas y por la recuperación de nuestros ferrocarriles, como parte de la lucha unitaria de nuestro pueblo para derrotar el plan fascista de dependencia de Milei.

Como primera iniciativa de este movimiento impulsamos a partir del Encuentro por la Soberanía en Paraná el pasado 21 de Junio la propuesta de realizar una iniciativa nacional en las estaciones de trenes, denunciando la privatización del Belgrano Cargas y de todo el sistema ferroviario que empuja el gobierno nacional, y convocando a ser parte a todas las organizaciones y compañeras y compañeros que quieran sumarse.

(*) Miembro de la Red Nacional por la Recuperación de los Ferrocarriles

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HISTORIA INDEPENDENCIA

Hasta romper todas las cadenas

Por Facundo Guerra (*)

1816

La revolución atravesaba una situación crítica. Tras la derrota de Napoleón en la batalla de Waterloo, retornaban los reyes absolutistas, entre ellos Fernando VII en España, decidido a restaurar su dominio sobre las colonias americanas. En el continente, habían sido aplastadas las revoluciones en México, Caracas, Quito, Nueva Granada y Chile, y el Ejército del Norte, al mando de Rondeau, había sufrido su peor derrota en Sipe-Sipe. Es interesante pensar en los contextos difíciles para la lucha revolucionaria que nada es imposible cuando el pueblo ubica que hay un verdadero proyecto emancipador. “Al pueblo que quiere ser libre, no hay poder humano que lo sujete” (Güemes).

Sean eternos los laureles

Manteniendo encendido el fuego del sur, Artigas había recuperado la Banda Oriental y, en 1815, declaraba la independencia en el Congreso de los Pueblos Libres. Mientras tanto, Gaspar Rodríguez de Francia sostenía la resistencia en Paraguay. La revolución se mantenía viva gracias a la heroica resistencia de Güemes y los pueblos del Alto Perú, que llevaron adelante la famosa guerra de guerrillas. Los gauchos e indígenas “infernales” detuvieron siete invasiones realistas. De los cien caudillos que lideraron la “Guerra de las Republiquetas” (Azurduy, Padilla, Arenales, Warnes, Cumbay, Camargo, entre otros) sobrevivió menos de una docena. De los dos mil afrodescendientes que integraron el Ejército de los Andes, regresó menos del 10 %. “Un día se sabrá que nuestra patria fue liberada por los pobres, y los hijos de los pobres, nuestros indios y los negros, que ya no volverán a ser esclavos de nadie” (San Martín).

Traidores a la Patria I

Ante la ofensiva realista, la élite criolla (que solo aspiraba a romper los lazos con España pero mantener intactas las estructuras de explotación feudal y esclavista) buscó múltiples formas de entregar la revolución al mejor postor. Alvear, siendo Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata, llegó a ofrecer estos territorios como colonia al Imperio británico. No fue el único intermediario: también hubo negociaciones con portugueses, franceses y otros poderes imperiales. Esta tradición cipaya y vendepatria, lamentablemente, conserva una profunda y persistente continuidad histórica.

Congreso de Tucumán

La corriente combativa presionaba para declarar la independencia. San Martín escribía al diputado por Mendoza: “¿Hasta cuándo esperaremos para declarar nuestra independencia? ¿No es cosa bien ridícula acuñar moneda, tener el pabellón y escarapela nacional y, por último, hacer la guerra al soberano de quien se dice dependemos, y permanecer a pupilo de los enemigos?”. En el Congreso, Belgrano propuso establecer una monarquía dirigida por los descendientes de los incas, consideraba a parientes de Túpac Amaru, el líder de la gran revuelta contra el imperio español. El 9 de julio se firmó la declaración de independencia de España, y el día 19, en sesión secreta y ante la presión de San Martín y Güemes, se agregó la fórmula “y de toda otra dominación extranjera”, cerrando el paso a los invertebrados de la dependencia. El Congreso no fue solo una declaración política: terminó de otorgar el respaldo central (en soldados y recursos) al plan continental de San Martín, con la creación del Ejército de los Andes, un ejército interterritorial e intersectorial, compuesto por argentinos, chilenos, originarios y afrodescendientes. También esbozó la posibilidad de un gobierno de los Estados Unidos de América del Sur, anticipando, años más tarde, la propuesta de Patria Grande impulsada por Bolívar.

Revolución inconclusa

La izquierda de Mayo tenía un proyecto de Nación verdaderamente independiente. “Seamos libres, que lo demás no importa nada”, pensaba San Martín, soñando una independencia de toda dominación extranjera. Una independencia que pusiera fin al régimen autoritario de unos pocos, tal como advertía Moreno: “No se trata de mudar de tiranos, sino de destruir la tiranía.” Una Nación que fomentara la industria y distribuyera la tierra, como proponía Belgrano: “No exportemos cuero, sino zapatos.” Una Nación federal, sin esclavitud y con igualdad, donde “los más infelices sean los más privilegiados”, como sostenía Artigas. Sin embargo, ese proyecto integral fue derrotado por la élite criolla terrateniente y feudal, que bloqueó el desarrollo de una Nación verdaderamente soberana y moldeó el país sobre las bases del latifundio y la dependencia.

Traidores a la Patria II

Existe una línea histórica de traición que va desde Rivadavia y Alvear hasta Milei. El actual presidente aglutina la peor tradición cipaya. El año pasado, habría declarado: “El mejor recurso para defender nuestra soberanía es reforzar nuestra alianza estratégica con Estados Unidos.” Lo dijo en presencia de la generala norteamericana Richardson, quien afirmó que nuestra región es importante por el litio, el agua y las tierras raras, como quien se relamía ante el bocado. Con el fascismo dependiente de Milei vuelven a emerger los planes de colonia que intentaron llevar adelante sus antecesores vendepatrias. Las muestras son múltiples: I) Enviar la recaudación de oro a los bancos de Inglaterra, ¡del país ocupante e invasor de parte de nuestro territorio! II) Nueva escalada y entrega del patrimonio nacional a través de privatizaciones y del RIGI, que le otorga beneficios sin precedentes a los capitales extranjeros para el saqueo de nuestro territorio y riquezas, lo que hace crecer la disputa entre las potencias imperialistas. III) Reducción de aranceles a las importaciones, que quiebra la industria nacional y las economías regionales, dejando a Tierra del Fuego como una zona inviable para la producción, pareciendo cumplir una promesa secreta con la generala Richardson. IV) Reforzar el endeudamiento externo con las estafas del FMI; Argentina debe pagar más de 10 mil millones de dólares anuales, equivalente a la construcción de 200 mil casas por año. V) Y, sobre todo, como quedó demostrado el último 2 de abril, legalizar la ocupación en Malvinas al reconocer el derecho de autodeterminación de los kelpers. Finalmente, es sumamente preocupante que el presidente ate a nuestra Nación a los planes e intervenciones genocidas que están llevando adelante Estados Unidos e Israel.

Concluir lo inconcluso

En 1947, Perón realizaba un acto en la Casa de Tucumán para declarar la independencia económica, con el objetivo de “romper los vínculos dominadores del capitalismo foráneo enclavado en el país”, porque, como decía el líder justicialista, “sin independencia económica no hay posibilidad de justicia social.” Sin embargo, casi ochenta años después, la declinación de la soberanía avanza. La dependencia penetra cada poro de nuestra sociedad: deforma la economía, saquea nuestras riquezas y busca colonizar nuestras mentes. La consecuencia es clara: desigualdad, hambre y pobreza. Esta dependencia se estructura en base a un sistema oligárquico e imperialista, sostenido por instituciones podridas, como ha quedado en evidencia con la proscripción de la presidenta del PJ. En el marco de la crisis del sistema global, es una forma de dependencia atravesada por diversas expresiones de fascismo y guerras. Clara Zetkin, la gran dirigente comunista, presagió: “El fascismo no es más que la expresión de la desintegración y decadencia de la economía capitalista”. Milei es producto de esa decadencia, pero en su versión de barbarie fascista dependiente. La reacción del capital solo podrá ser frenada por la reacción popular. Como sostuvo Mao: “la revolución impide la guerra, o la guerra trae la revolución”. Parafraseando a Gramsci, hay que hacer nacer lo nuevo para terminar con los monstruos de la dependencia. No hay posibilidad de independencia económica sin soberanía política, y no hay soberanía política sin una segunda y definitiva independencia integral. Como en 1810, la salida no germinará en los palacios, sino en las calles. Hagamos realidad los sueños de los patriotas de Mayo.

(*) Licenciado en sociología. Secretario del PCR de Mendoza

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MARINA MERCANTE SOBERANÍA

Bautizaron embarcación construida con mano de obra 100% nacional y que navega en aguas argentinas

“Todavía hay esperanza de recuperar la Marina Mercante”, señalaron desde gremio marítimo

En un acto que trasciende lo simbólico y se afirma como un gesto de soberanía, fue botada la nueva lancha de prácticos ZEYA LP, construida íntegramente en territorio nacional y con mano de obra argentina.

La incorporación del buque a la flota operativa del Grupo Servicios Marítimos representa una señal de compromiso con la industria naval nacional, la defensa del trabajo argentino y el fortalecimiento de la Marina Mercante.

El evento tuvo lugar en el astillero Unidelta, donde se desarrolló todo el proceso de construcción de la embarcación, bajo estándares de última generación. Con bandera argentina y tripulación nacional, la lancha ZEYA LP es considerada por el sector como un ejemplo concreto de que es posible construir y crecer en el país, aún en un contexto adverso.

En ese orden el Capitán Mariano Moreno destacó “la importancia de defender la soberanía de nuestras aguas y el rol estratégico de la industria naval argentina”.

El bautismo de una embarcación, “no es solo un acto ceremonial: es un momento que queda grabado para siempre en la vida del barco, de su dueño, de su padrino o madrina, y de quienes la tripularán. Pero también puede ser un hecho que trasciende lo simbólico y marca una posición frente al presente del país”, agregó el Secretario General del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo

Además Moreno indicó que, el bautismo del ZEYA LP “se convierte en un acto de reafirmación nacional, en medio de un contexto adverso para la industria, la logística y el trabajo argentino. Una acción concreta frente a una coyuntura donde la soberanía marítima y fluvial está amenazada por políticas de desregulación y desinversión”.

El Grupo Servicios Marítimos incorporó este 3 de julio a su flota operativa la lancha de prácticos ZEYA LP, una embarcación de última generación construida íntegramente en el astillero nacional Unidelta, con bandera argentina y tripulación argentina.

“El ZEYA LP no solo fue construido en el país, sino que navega bajo bandera nacional y con trabajadores argentinos. Eso es una apuesta concreta por la soberanía, el empleo nacional y el fortalecimiento de la marina mercante”, valoró el Secretario General del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo

“En momentos donde todo está puesto al servicio de la flexibilización más profunda y descabellada de la historia argentina, tener armadores que piensan en el país, en la industria naval argentina y sus trabajadores, en tripulantes argentinos, es motivo de un reconocimiento y esperanza para el Centro de Patrones”, apuntó el dirigente gremial

En ese orden Moreno destacó especialmente a Lanchas del Este S.A. y Pailebote S.A., quienes “apostaron a la unión estratégica y a la bandera celeste y blanca, demostrando que se puede producir, trabajar y crecer desde y en Argentina”, dijo

“La soberanía no se declama, se construye. Como cada pieza de esta embarcación, que desde hoy empieza a surcar las aguas argentinas con la bandera bien alta-. Eso es hacer patria. Como también lo hacemos los trabajadores cuando reclamamos que no se destruyan la marina mercante y la industria naval argentina”, concluyó el Capitán.

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SOBERANÍA YPF

El fallo de YPF y la Soberanía Nacional

Por Augusto Vidoret (*)

La reciente decisión de la jueza Loretta Preska, que condena a la Argentina a pagar USD 16.099 millones a fondos buitres por el caso YPF, no juzga la expropiación realizada en 2012. Lo que se juzga es el incumplimiento de una cláusula empresarial asumida por el Estado argentino en 1993, cuando privatizó la petrolera y aceptó someterse a las leyes y tribunales de Nueva York.

Ese fallo, aparentemente técnico, es en realidad un caso emblemático de cómo los pactos de entrega de soberanía del neoliberalismo pueden transformarse, décadas después, en verdaderas condenas económicas contra el interés nacional.

En 1993, durante el gobierno de Carlos Menem, se privatizó YPF y se pactó que cualquier accionista que tomara el control debía lanzar una Oferta Pública de Adquisición (OPA) por el resto de las acciones. Además, se aceptó que cualquier disputa legal se resolvería bajo ley del Estado de Nueva York. Estos compromisos, asumidos  voluntariamente por el Estado, son los que hoy permiten que una jueza extranjera imponga un fallo contra el país.

¿Quién es el fondo buitre Burford Capital y qué vínculos tiene con el actual gobierno?

Burford Capital es un fondo de inversión con sede en Londres y operaciones en Estados Unidos, especializado en la compra de derechos litigiosos. Su negocio consiste en adquirir demandas de
empresas quebradas o en crisis para luego litigar contra Estados, buscando compensaciones millonarias.

Fue quien compró en 2015 los derechos del Grupo Petersen en la quiebra, por una fracción del valor que hoy reclama judicialmente. Desde entonces, ha financiado múltiples litigios contra la Argentina, incluyendo el caso YPF.

Burford Capital tiene un lobby jurídico y financiero muy activo. Algunos analistas y periodistas han señalado vínculos indirectos con figuras del actual gobierno argentino, como Luis Caputo (ex ministro de Finanzas de Macri y actual funcionario de Milei), por su paso por fondos de inversión y contactos con operadores internacionales. Aunque no hay evidencia directa de una relación contractual, sí existe una afinidad ideológica y estratégica en la apertura irrestricta al mercado financiero global.

En ese contexto, es importante preguntarse qué rol juega la política económica actual ante fallos que benefician a fondos como Burford: ¿los enfrenta o los habilita?

En 2012, el gobierno de Cristina Fernández de Kirchner expropió el 51 % de YPF en manos de Repsol, en una decisión soberana avalada por ley del Congreso. Sin embargo, no se cumplió con la OPA, por razones de oportunidad política, falta de fondos y prioridad estratégica en recuperar la soberanía energética. El fondo buitre Burford Capital compró los derechos de litigio del Grupo Petersen y demandó a la Argentina en Nueva York por no haber lanzado la OPA.

La jueza Preska consideró que no se juzgaba la expropiación, sino el
incumplimiento contractual. Y por ello condenó al país a pagar una suma que no representa la participación original de Petersen, sino lo que el Estado habría debido pagar si hubiera lanzado la OPA por el resto de las acciones.

Este fallo, legalmente posible por los compromisos firmados en los 90,
muestra cómo la soberanía nacional sigue condicionada por decisiones del pasado. La necesidad de revisar el marco legal heredado y proteger jurídicamente a nuestras empresas estratégicas no puede seguir postergándose.

Brindamos este informe a las organizaciones políticas comprometidas con la soberanía, para aportar herramientas jurídicas y claridad frente a un fallo que, aunque revestido de legalidad comercial, es profundamente adverso al interés nacional.

¿Por qué el Estado argentino no derogó formalmente los estatutos de YPF de los años 90?

Durante el proceso de expropiación en 2012, el Estado argentino cuestionó abiertamente el marco legal heredado de la privatización. Tanto en el mensaje del Poder Ejecutivo al Congreso como en los debates legislativos, se criticó ese entramado normativo por haber facilitado el vaciamiento de la empresa, su control extranjero y la subordinación jurídica a tribunales foráneos.

Sin embargo, esos estatutos -incluyendo la obligación de someter disputas a la ley del Estado de Nueva York- no fueron derogados. Tampoco se retiró a YPF de la cotización bursátil internacional.

La Ley 26.741, que declaró de utilidad pública el 51 % de YPF, fue un acto soberano importante. Sin embargo, no se dio en el marco de un conjunto de leyes revolucionarias que pusiera fin al entramado normativo de dependencia económica y política. Por el contrario, fue
una reforma puntual y coyuntural, que otorgó beneficios específicos dentro de una red normativa -nacional e internacional- regida por la lógica de entrega de recursos y subordinación financiera.

En ese marco, una derogación abrupta del estatuto y del sometimiento a tribunales extranjeros podía haber generado:

  • Demandas por default contractual,
  • Sanciones económicas,
  • Embargos de activos estatales en el exterior,
  • Y una profundización del aislamiento financiero argentino.

Frente a ese riesgo, el gobierno optó por avanzar dentro de los márgenes legales disponibles, priorizando la recuperación del control accionario sin abrir, al mismo tiempo, un frente de conflicto jurídico multilateral.

En síntesis: el Estado argentino impugnó políticamente el marco privatizador, pero no lo desmanteló legalmente. Esta tensión -entre la decisión política soberana y la continuidad jurídica del orden neoliberal- explica en parte las condiciones que permitieron el avance judicial del capital financiero internacional sobre una decisión del Estado nacional.

 

(*) Dr. Augusto Vidoret. Abogado. Matrícula L – XLV F – 362 – Colegio de Abogados de Rosario

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SOBERANÍA ALIMENTARIA TIERRA

Algodón que se va, que se va…

Por Pablo Benetti (*)

Como dice la canción de Ramón Ayala:

Rumbo a la cosecha, cosechero yo seré

Y entre copos blancos mi esperanza cantaré

Con manos curtidas dejaré en el algodón mi corazón….

Algodón que se va, que se va, que se va

Plata blanda, mojada de luna y sudor

Y un ranchito borracho de sueños y amor

Quiero yo, quiero yo…”

Siguen las buenas noticias para un sector de la población que odia el apoyo del Estado en general y en especial hoy hacia los pequeños y medianos productores, y siguen las malas noticias para los más pobres del campo argentino.

La gran mayoría de las organizaciones del sector agropecuario están mirando el martes 1° de julio, donde van a volver o no las retenciones a los valores anteriores -para la soja a 33%-, como que ese fuera el único tema para tratar y reclamar; dejando de lado y sin identificar el resto de las cuestiones que afectan a grandes sectores productivos de la Argentina.

Desde el 10 de diciembre de 2023 el gobierno de Javier Milei ha dedicado todo su esfuerzo y utilizado todos los mecanismos a su alcance para derogar, eliminar, y destruir instituciones, programas, leyes y fideicomisos que alentaban, fomentaban y acompañaban a las y los pequeños agricultores: el Instituto de Agricultura Familiar, el ProHuerta, la Ley Ovina, la Ley Caprina, el PRODAF (Programa de Desarrollo Rural y Agricultura Familiar), el INTA –que reconfiguran y achican-, entre otros.

Ahora, la semana pasada, eliminó la Ley de Fomento a la Producción Algodonera, ley que no solo fomentaba la producción primaria sino también apoyaba toda la cadena algodonera, brindando los fondos para la lucha contra el picudo algodonero, insecto que produce una gran merma de la producción, por nombrar algunas de las funciones de esta ley.

En Entre Ríos en los últimos años no se ha realizado una gran superficie del cultivo de algodón, no porque no sea un cultivo que dé rentabilidad al productor sino por la logística que implica su cosecha y carga y las grandes distancias que hay que recorrer para llevar lo producido hasta la desmotadora más cercana -más de 700 km-, esto multiplica por 2 o por 3 los costos para el productor. Pese a esto entre el 2006 y el 2017 se fomentó el cultivo logrando instalar la siembra en surco estrecho y la cosecha mecánica con la cosechadora de arrastre «Javiyú», diseñada por INTA Reconquista. En estos años se llegaron a realizar más de 1.000 hectáreas entre los pequeños productores del norte entrerriano, entre los Departamentos La Paz y Feliciano, con un trabajo articulado desde las organizaciones de los productores (APROCENER), el gobierno provincial e instituciones como el INTA y la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UNER.

Pero si nos remontamos a la década del ’90, se realizaron cerca de 10.000 hectáreas entre el norte de Entre Ríos y el sur de Corrientes, logrando instalar en Feliciano una Desmotadora, con la creación de Cooperativas que nucleaban a los cientos de pequeños productores que realizaban el cultivo. Este cultivo para los pequeños productores era de gran ayuda, posible en pequeñas superficies -desde 1 a 10 hectáreas-, realizando la cosecha a mano y teniendo un ingreso extra a las múltiples actividades productivas que realizaban.

El algodón en esa época era gran demandante de mano de obra, ya que se realizaba la carpida del cultivo a mano y luego la cosecha con gente, dando trabajo a cientos de cosecheros de la zona.

La lucha por la ley de fomento del cultivo fue un proceso largo. Nucleó a varias asociaciones de productores, a las desmotadoras, hilanderías y textiles, que lograron con el apoyo de los gobiernos provinciales y la lucha de las organizaciones del sector y de las/os productores grandes y chicos en asamblea y marchas la sanción de la ley. Ahora por un decreto del gobierno de Milei se deroga la ley, dando por tierra todo el trabajo y la lucha realizados en tanto tiempo y dejando sin ninguna ayuda o fomento para este cultivo.

También hay que decir que en la Provincia de Entre Ríos, en el último año no llegó a los productores el fondo de esta ley; no sabemos si no se gestionaban o si llegaba y se destinaba para otras cuestión, o quizá se devolvió como en otros Programas, que por inacción o incapacidad la provincia ha devuelto fondos que estaban destinados a pequeños productores.

Desde la Federación Nacional Campesina, venimos planteando la necesidad de la más amplia unidad para poder enfrentar y ponerle un freno al gobierno de Milei y sus políticas destructivas, y lograr que se restituyan las medidas tomadas para que el Estado vuelva a asistir y acompañar los procesos productivos de los pequeños productores. Programas, instituciones y proyectos que vitalizaban la vida en la zona rural, que fomentaban la diversidad de los cultivos, que respetaban tradiciones y cultivos históricos; que brindan identidad y arraigo a las familias y las comunidades. Lo que está en juego es demasiado importante para no sumarnos a defender con compromiso logros históricos de las comunidades en la defensa de la vida misma en nuestra zona rural.

 

(*) Pablo Benetti es Ingeniero Agrónomo y referente de la Federación Nacional Campesina de Entre Ríos.

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