Una nota del portal PESCARE titula: “Etapa final de la burocracia administrativa: Finalmente comenzó el desguace de la draga Mendoza 259-C”. Y agrega: “… la draga 259-C abandonada entre el herrumbre y su flora natural en cubierta. Postal de una película de terror…”.
Nada dice esta nota playita del daño producido a la draga por la falta de envío de protección (tipo Yokohama) entre el muelle y la draga. Sin esa protección, la arremetida del mar contra la draga fue letal para la misma; tampoco habla de los años que lucharon los tripulantes, sindicatos y demás trabajadores para salvar a la draga de la pasividad del propio Estado y del consorcio de gestión del puerto de Mar del Plata. No hubo en años un solo peso para su cuidado, su protección, pero hoy se dispone de U$S 8.200.000, más impuestos, para su desguace. Se ve que la burocracia administrativa estaba muy trabada para pagar protección de goma adecuada para colocar entre la draga y el muelle a fin de protegerla y mágicamente se destraba y aceita para desguazarla. Somos inútiles para proteger los bienes de todos los argentinos pero muy veloces para cortarlos en pedazos y convertirlos en chatarra de acero naval. La diferencia de plata a gastar es abismal, protegerla con dos protecciones neumáticas entre draga y muelle cuesta hoy entre 200.000 y 500.000 pesos C/U; o sea, máximo hoy un millón de pesos. No gastamos un solo peso en conservar, mantener, proteger, y millones de dólares en desguazar y muchos más millones de dólares en contratar una draga que haga el trabajo que bien podría hacer (antes de su deterioro) la draga 259-C Mendoza. ¿Será que con el desguace al igual que con la contratación o licitación de dragado hay algún “porcentaje de retorno” (por así decirlo) y con el trabajo de dragado nacional y estatal no?
En el siguiente video realizado por el Foro por la Recuperación del Paraná podemos ver claramente de lo que estamos hablando…
El tema es que, tanto con el gobierno de Macri como en este, se da la contradicción de que no hay plata para proteger, mantener, conservar la flota de dragas del Estado pero sí hay millones de dólares para destruirlas, desguazarlas. Igual pasa con el personal, trabajadores de la ex Dirección Nacional de Vías Navegables que con el actual gobierno fueron cruelmente despedidos.
Pero si bien entre ambos gobiernos no hay mucha diferencia en el resultado, el desguace, sí lo hay en el costo del mismo. Fíjense cuánto salía en 2018 (gobierno de Macri) desguazar una embarcación gemela, la draga 260-C “Santa Cruz”, hundida, sumergida y apoyada en el fondo o lecho del Río de la Plata, en los muelles de la Isla Demarchi.

El desguace en Octubre de 2018 costaba $ 67.727.014,25 + IVA = $ 81.949.687,24. El dólar en esa fecha estaba a $ 26,90; o sea, en dólares nos costó a los argentinos U$S 3.046.456,77 y la draga (gemela a la 259-C), como se aprecia en las fotos, estaba hundida. Se tuvo que recurrir al trabajo de buzos tácticos y como tenía buques apoyados era más arduo y más riesgoso el trabajo. Fíjense las imágenes de la draga 260-C al momento del desguace.

Si bien la draga 259-C Mendoza está en el mar, está en el reparo del puerto, no en mar abierto. Nada justifica que, siendo la misma empresa que las desguaza a ambas, la draga 260-C Santa Cruz nos haya costado a los argentinos U$S 3.046.456,77 y el desguace de la draga 259-C Mendoza gemelas entre ambas y a flote, nos salga hoy U$S 8.200.000 más impuestos. ¿Qué pasó en el medio?
¡¡Hay una diferencia de más de 5 millones de dólares!!
La misma empresa, dragas gemelas.
Debe haber una investigación de dónde sale tanta diferencia en dólares
Pero lo más terrible, lo que más duele, es que los impuestos del pueblo (porque solo los de abajo parece que debemos pagar) sirvan solo para destruir los pocos buques (o dragas) que tenemos como flota los argentinos. Con nuestros impuestos pagamos durante más de 30 años una licitación de dragado que beneficia a las terminales multinacionales cerealeras del río Paraná y también el desguace de nuestras dragas, las del Estado, o mejor dicho, de todo el pueblo argentino.
Un doble gasto en dólares: desguazar las dragas del Estado y licitar un dragado extranjero
La doble dependencia. No mantenemos lo que tenemos, lo vaciamos, saqueamos y desguazamos la última flota del Estado y por otro lado contratamos, licitamos el dragado extranjero.
Argentina, a través de gobiernos entregadores de la patria, sufre la doble vara de la dependencia. Esta, y no otra, es la razón fundamental que postra al país en la pobreza. Nos desindustrializan, inutilizan, mientras los extranjeros saquean las riquezas naturales sin dejar nada. Nos ponen de rodillas, se roban todo, hasta el comercio exterior nos robaron. Nos quedamos casi sin Marina Mercante con este sistema de no proteger lo propio y preferir contratar lo extranjero, que nos sale muy caro, carísimo.
Más de 5 millones de dólares, una diferencia que no encaja, no cierra, que llama la atención en un país distraído. Por la prensa que no investiga, por una población sumida en sus propios problemas de la plata que no alcanza, por la pobreza y desocupación, mientras se malgastan millones de dólares en desguazar, destruir y en licitaciones de dragado que bien podrían hacerlo las embarcaciones que destruyen, que no mantienen, que descuidan, porque según dicen “no hay plata”; depende para qué no hay.
Por eso, hoy más que nunca debemos impugnar una licitación de dragado del río Paraná por ir en contra de la salud ambiental de la población argentina, que ya varias veces rechazó. Una licitación que se pretende imponer por la fuerza al no tener consenso en la población.
Una licitación sin ningún estudio previo ambiental que proteja a la población.
Una y mil veces debemos impugnar, rechazar, declarar nula de nulidad absoluta una licitación de dragado del río Paraná y Río de la Plata que solo sirve a puertos extranjeros, mientras se destruyen las dragas del Estado, de los argentinos.
13-12-2025
Feliciano Ramos
Capitán Fluvial (Dragador)
Miembro del “Foro por la Recuperación del Paraná”
